20.10.20 Sor Leonor de Santa María Ocampo OP. Breves rasgos de su vida (1841-1900).
Por Mons. José María Arancibia.
Hoy presentamos a la Isora María Ocampo, en su faceta de misionera en “Breves rasgos de su vida”. A las mujeres y hombres que dejaron huellas ondas de santidad salimos a buscarlos, conocerlos de cerca, dejarnos inspirar e iluminar por sus virtudes, actitudes, por el amor con el que vivieron y se confiaron a Dios llenos de fe, confianza y esperanza. Son un tesoro escondido que salimos a mostrar.
Quizás sor Leonor no se consideró a sí misma “misionera”. Pero lo fue de veras, y con toda la Iglesia. De joven laica, como ella confiesa, Dios le infundió un gran celo por el bien de las almas, de modo que las abrazaba con amor en su corazón e intercedía por todas. Enseñó a niños y grandes las verdades de la fe, los preparó para los sacramentos y consoló a moribundos.
Conoció el sufrimiento físico y moral de la mujer, que le partía el corazón y quiso ayudarlas. Ansió pertenecer a la Orden fundada por santo Domingo, para predicar la verdad del Evangelio y combatir los errores.
Como monja conoció las andanzas misioneras del padre Reginaldo Toro, su confesor, a quien acompañó con sus plegarias. Enamorada de su vocación contemplativa, fue de las mujeres orantes que en Córdoba recibían -y siguen recibiendo- tantos pedidos para interceder ante el buen Dios, por las necesidades materiales y espirituales.Ilustraciones: Eva del Castillo.