El próximo 12 de diciembre se celebrará la profesión de sor Mercedes Monestés OP. en el día de la fiesta en honor a Nuestra Señora de Guadalupe. Se consagrará a Jesús en la Profesión Simple a la Orden de Predicadores. El texto del Evangelio que acompaña este momento singular en su vida es el pasaje de Lucas 1,38 «He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra».
La Comunidad de las Monjas del Monasterio Santa Catalina de Siena invita a todos a participar de la ceremonia que será presidida por Monseñor Ricardo Seirutti Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Córdoba, el miércoles 12 de diciembre a las 19 horas en el Monasterio Santa Catalina (calle Obispo Trejo 44) ciudad de córdoba.
Sor Mercedes tiene 32 años, es novicia en el Monasterio Santa Catalina de Siena desde hace cuatro años, ingresó el 14 de agosto de 2014, pero antes realizó la experiencia de tres meses, desde el 6 de diciembre de 2013 al 21 de febrero de 2014.
Qué es la Profesión Simple o Temporal
Concluido el tiempo de noviciado, se realiza la primera profesión, que es temporal en la cual la novicia se consagra a Dios y a la Iglesia a través de los votos, como monja dominica contemplativa.
Se debe resaltar que en la Orden de Predicadores se hace la profesión solamente de obediencia «mediante la cual la persona se entrega totalmente a Dios y cuyos actos son más propios del fin que busca la profesión, que es la perfección de la caridad y por ello se acepta cuanto vaya encaminado a la vida apostólica». También la vida común «para permanecer fiel a su espíritu y a su misión, necesita el principio de unidad» que se obtiene por la obediencia a santo Domingo y a sus sucesores.
La Profesión se realiza en manos de Madre Priora: La professio in manibus es un elemento central de la profesión dominicana que deja abiertos los caminos al obrar de Dios. “La profesión a través de la ofrenda de nuestras manos y, al mismo tiempo, a través de la ofrenda de las manos de quien, sostiene las nuestras y recibe nuestra profesión, es un intercambio mutuo de voluntades. Las manos abiertas a la gracia de Dios, abiertas a la misericordia de los hermanos y hermanas con quienes comprometemos nuestro futuro.”